En 1868, La Real Casa de la Moneda deja de funcionar como tal, entra en subasta y es comprada por particulares que acometen una serie de reformas para transformar las antiguas salas en residencias de alquiler. De esta época se sabe que se eliminó parte de la muralla medieval y se disposieron pozos de saneamiento que hemos dejado a la vista bajo cristales.
En 1944 el inmueble vuelve a cambiar de uso y se convierte en la sede de los Diarios de Sevilla. Para ello se llevaron obras de adaptación para las nuevas instalaciones, lo cual supone las pérdidas de algunas partes de La Casa del Tesorero.
Durante la década del 1990, se retoma la actividad del inmueble, dedicándose su parte inferior a la hostelería, donde se abrió el tradicional Mesón Torre de la Plata, el cual se mantuvo hasta la presente reforma que dio paso a lo que hoy conocemos como el restaurante La Casa del Tesorero, lugar único en Sevilla que no debe perderse nadie.
